Marzo 2010, a 2 años del
día que tuviste que partir.

¡Eras pedante!
dejarías de haber estudiado
en la Facultad de Filosófía
de la Universidad, la UNAM
¿Acaso hay otra? je je je.

Que bueno que mi facu
esta al otro lado de C.U.
Sólo por tí y 3 personitas
más amigos nuestros, tu
facultad está redimida
para mí. Je je je.

¡O diosa!

Eras orgullosa, y llorabas.
Eras algo rígida pero muy
muy flexible también.
Eras tantas cosas,
actriz, escritora, activista,
algo diva y en fin.

Genio y figura...
hasta la sepultura.
Dijiste en una conferencia:
"He visto morir a las mejores
mujeres, he visto... Sí,
he visto morir a las mejores
mujeres"; y también te referías
a tí.
 
Una tarde no peleste
para proteger un clavel.
Simplemente lo entregaste.
Detesto la filosofía pero
por necesidad he tenido
que estudiarla y a lo mejor
por ello te entendía a las
primeras ¡vale m...!

Y luego tuviste que partir;
y no se me olvida la promesa
de esa tarde: la deseo cumplir,
y no se cómo. Los caminos se
han separado y ahora tengo
muchas dudas.

Yo estoy en el lugar opuesto
al tuyo, yo recorro ese camino.
¡Mira! esta pequeña
web es muestra de ello,
pero... reflexionaré y
pensaré: "es bueno esto
de las contradicciones, los
opuestos, lo contrario, bla,
bla, bla".

¿Sabes? Recibí hace unos
días el documento legal
por el cual tú estabas
luchando.

"Somos indocumentadas
en nuestra propia tierra"
"Somos indocumentadas
en nuestra propia tierra"
¡Que gritadera camino al
zócalo bajo el rayo del sol,
desgañitándonos!

Tú sacabas fuerzas para
luchar aún cuando tenías
que resistir los dolores
que un mounstruoso
cangrejo te provocaba.

Y recordé a las otras dos
Deltas que nos dejaron
sin haber visto los días
que yo disfruto ahora,
esa condicionada libertad,
ese reconocimiento de
derechos, toda esa...
madeja de palabrerías.

Y la verdad no te estoy
presumiendo, me siento
triste pues ¡cómo diablos
que yo si lo haya logrado
y tú no.

La vida es la gran maestra
del sarcasmo.

La tarde que encerraron
tus cenizas en un cubo
de madera con un nombre
grabado que no era
precisamente el tuyo
sentí mucho enojo.

Sí, contra tu familia, contra...
bueno... recordé que meses
antes no protegiste un clavel
que significaba tu vida y lo
diste con una sonrisa.
Sólo suspiré.

Gracias por permitirme
conocerte, también por
haber luchado por nosotras
y nosotros, fue mucho
aunque no hubo globos,
sonido, ni mucha fiesta.

Y se que falta más,
hace falta todavía más
detrás de una engañosa
cortina de avances y gente
"openmind" políticamente
correcta.

Te extraño, y nos haces
mucha falta, desde el
Panteón ya lo habrás visto.
Nadie con tu propia visión en
este planeta.  ¿Qué le baje?
bueno, -planetoide-.

Nos reuniremos en un
abrir y cerrar de ojos;
el tiempo en lo abstracto
es un queso derretido.

Extraño tu cancioncita:
"La gente dice que yo
me veo raro, siiiiiii muy
raro...". Arremedando
a, a, a... mejor no digo
nombres, je je je.

Extraño lo que aprendía
de tí, extraño tus choros
mareadores... ¡Ahora
flétate el mío! je je je.

Desde aquí hasta donde
estés, Favi, te recuerdo,
te extraño, te quiero
amigocha.

Asiri.

P.d. Perdona los dedazos,
faltas de agricultura,
mala sintaxis, no ser
políticamente correcta
y ña!